» Las voces de los muertos.










He visto a hombres nacer y evolucionar. 
He visto a todo un mundo nacer, desarrollarse y destruirse. 
Yo no fui un castigo para la humanidad. Ellos sí.
Los hombres sólo dañan todo lo que tocan. 
Nunca tienen buenas intenciones.
Son mentirosos, crueles, lascivos y violentos.
Todos son así.

¿Y si hubiera alguien diferente?

¿Alguien diferente? Eso no existe.
El mundo donde he vivido ha sido así de frío.
Todos son unos animales desgraciados. Bestias sin compasión.


Pero, ¿y si hubiera alguien diferente?
Tal vez aquí exista un hombre ideal. 
Un perfecto y hermoso hombre que todos deberían seguir como conducta.


Eso es completamente imposible.
La única perfección soy yo. Lo realmente bello en ese mundo era yo.
Y me etiquetaron de maldito pecado.
Además, aquí estoy sola. En mi paraíso no existen los hombres.
No lo permito.
Espera... ¿Y esta voz?
¿Quién eres?. ¿Qué quieres?


No te alarmes. Sólo soy "yo", Pandora.
No te haré daño a pesar de susurrarte con mi sensual voz de hombre.
Yo no soy como ellos. No pienso en cómo destruirte, sólo te observo.
Confía en mí.

Jamás. Yo no confío en la palabra de los hombres y mucho menos en sus leyes.
Sal de mi cabeza, voz intrusa. No eres bienvenido a este Edén.
Dime, ¿cómo llegaste aquí?

Secreto.

¿Cómo te llamas?

Secreto.

Alguien que guarda secretos no es de fías. 
Ellos también los tenían. Y muchos.
¿Pero por qué hablo contigo, voz familiar?

Puede que no sea la primera vez que conversas conmigo.
Sí, soy familiar. Nos conocemos, Pandora. 
En realidad nos hemos encontrado varias veces.
Me conoces más de lo que te imaginas.
¿Acaso no tengo forma física para ti?
¿No quisieras probar de nuevo estos labios y sentir estos manos familiares?

¡NO! ¡VETE!
No te quiero aquí. Tú no me conoces. 
¿Por qué me nombras?
Yo no soy nada tuya. Este es mi paraíso y yo su reina.
¡INTRUSO!
No tienes forma, no he sentido tus labios y no quiero.
No quiero conocerte.
¡Sé que tus manos osarán violarme!

Pequeña mía...
Pandora...
Deja de engañarte a ti misma.
Yo soy tu salvación.
Yo soy esa parte cuerda de ti.
Deja que entre en ti...
... una vez más.

Todos mis sentidos unidos en uno.
Te conozco.
Te odio.
Poseame.
Yo soy la salvación.
Jadeos.
Excitación.
¿Qué quieres de mí realmente?
¿Cómo me has encontrado?
¿Cómo llegaste aquí?

Mi huella en ti está.
Y no sería la primera vez.
Me conoces desde antaño.
Me amas.
Condena. Perdición. Alternativa. Salvación.
Posesión. Jadeos. Excitación.
Lo quiero todo, Pandora.
Mi regalo me condujo hacia ti, hermosa.
Suicidio. Cambio.
Sabes que formo parte de ti, mi niña.

No hay comentarios:

¿Confesarás tu pecado, intruso?