» Despertando el instinto animal.

Siento que mi cuerpo se está transformando... Poco a poco en mí se va despertando el instinto animal que creía olvidado. Poco a poco en mí se va originando una nueva llama que arde con intensidad. Los vientos cambian y mi corazón se siente agitado. La naturaleza me está llamando, está susurrando mi nombre. Tiempos de paz acaban de invadir el Edén y yo siento que mi cuerpo se está adaptando con facilidad a los dichos cambios. La serenidad se hace dueña de mi hogar, de mi reino, de mi querido santuario. Y aún así, yo... aquí estoy, despertando al animal que llevo dentro. No tengo por qué temer a estos nuevo sentimientos y emociones. Puedo dejarme guiar por lo que está ocurriendo. Son nuevos tiempos para mí. Este elíseo está evolucionando, y con él, yo.

El ansia comienza a despertarse. Nuevas experiencias afloran en mi mente curiosa. Debo de prepararme para lo que pronto vendrá a mí. Debo de armarme de valor para asumir estos cambios. El animal pronto despertará. La llama pronto arderá con su máxima potencia. Ya no debo de temerle a nada. Y es que... la gran verdad es que esa llama que hay dentro de mí jamás se apagó, jamás desapareció. Siempre estuvo ahí escondida esperando el momento perfecto para ser alimentada. Y eso es precisamente lo que está ocurriendo en este mismo instante con todos los cambios que se están produciendo en el jardín del Edén. 

Esto es justo lo que necesito... cambios y motivaciones. Nuevas motivaciones han inundado mi mente. Esperanza. Al fin hay esperanza para mí. El instinto más primitivo, poco a poco, va despertando. Y no podía sentirme más preparada. Los tiempos de paz han llegado y aún así yo estoy más que preparada para dar guerra, mucha guerra. Pues no puedo evitar escapar a mi destino y olvidar quién soy. Mi alma se está liberando. Mi cuerpo se está impacientando demasiado. La naturaleza me está llamando. Pandora, Pandora, Pandora... el viento no deja de susurrarme al oído. Oh, Edén... cuánto misterio habita entre tus bosques. Oh, Edén... abriré mi corazón por completo al instinto animal que pronto florecerá y la llama podrá arder con fuerza y sosiego. 

Siento que una nueva vida se me está otorgando... ¡Pero qué maravillosa sensación es esta! Me siento preparada ahora para lo que está por llegar. No tengo por qué temer a estos nuevo sentimientos y emociones. Puedo dejarme guiar por lo que está ocurriendo. Son nuevos tiempos para mí. Este elíseo está evolucionando, y con él, yo. Nuevas voces resuenan dentro de mi cabeza. Son voces de esperanza. Son voces que me guiarán por los oscuros senderos que pronto se tornarán luz... Pero qué maravillosa puede ser la existencia de un ser maldito como yo.

Los vientos han cambiado. Las voces ya no me perturban. El instinto animal pronto tendrá lugar. El jardín del Edén se ha convertido en un nuevo lugar sagrado completamente diferente al que solía conocer. Estoy preparada para cualquier cosa. Tan sólo tengo que mantenerme firme, mirar al frente y luchar con todas mis fuerzas por lo que más quiero y ansío. Nuevas motivaciones han inundado mi mente. Al fin hay esperanza para mí. Al fin tiempos de paz han venido a mí. Al fin... Ya no tengo por qué tenerle a nada ni a nadie. Todo se convertirá en perfección. Las pesadillas al fin se disiparán por completo. La llama renacerá y la bestia que se oculta en mi interior me guiará por este nuevo mundo. Pronto... muy pronto... nuevas aventuras comenzarán.

Escucha la voz de tu interior, pues pronto llegará el momento del despertar. Escucha la voz de tu interior, pues pronto dará comienzo el nuevo juego. Escucha la voz de tu interior, pues sólo ese instinto podrá salvarte. Los vientos han cambiado. Las voces ya no me perturban. Ahora únicamente es el instinto lo que se apodera de mi ser, de mi verdadero ser, del yo eterno. Así pues, este es el nuevo poder, la auténtica realidad que se me ha sido concedida.

2 comentarios:

  1. la escucho, me gusta hacerlo.!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bienvenida de nuevo, amiga. Siempre hay que hacer caso a los instintos, a nuestra voz interior. Pues es sabia. Pues es la auténtica verdad que nos protege y guía. Un fuerte abrazo y nos seguiremos leyendo.

      Eliminar