» Perdiendo la noción del Tiempo.

Tiempo. Tiempo es lo que necesito. Dicen que el tiempo lo cura todo, pero a veces pienso que no es verdad. Siempre tienen que haber recuerdos negativos que vuelven a nosotros para hacernos daño, y eso es una realidad, esas cosas pasan realmente. Antes solía creer que el tiempo no era mi enemigo. Que aquí, en el jardín del Edén, lo que denominamos tiempo no existe. Puede que sea así. Puede que esté en lo cierto. Sin embargo, existe un tiempo, y va contrarreloj. Es el nuestro. Es mi Tiempo. Se trata de nuestras almas, las cuales he podido comprobar que no son eternas. Es la energía, el núcleo de nuestra esencia y creedme cuando os digo que tiene fecha de caducidad. Lamentablemente, el Tiempo se nos agota, y no queremos darnos cuenta, o más bien, este paraíso hace que no nos demos cuenta de esta situación.

Es algo grave. Es una situación que me impide conciliar el sueño por las noches. Tiempo no espera a nadie. Tiempo no mira jamás hacia atrás ni se detiene por nada ni nadie. Sin embargo, siempre quiere dañarnos recordándonos fragmentos de memoria o simplemente haciendo que nuestro aspecto cambie para alertarnos de que debemos aprovechar ese tiempo que se nos ha sido otorgados. Tiempo. Tiempo es lo que necesito. Dicen que el tiempo lo cura todo, pero a veces pienso que no es verdad. Quiero más tiempo, quiero más vida. Quiero poder sobrevivir a este juego hasta el fin de los tiempos. 

No quiero desvanecerme tan pronto. No quiero sentir que mi corazón se encoge a cada segundo que pasa. ¿Por qué el Edén no envejece? ¿Por qué el Edén nos tortura de esta manera? Toda la culpa la tiene este Elíseo. O tal vez no, Tal vez la culpa sea enteramente del Tiempo. O tal vez la cuestión sea otra muy distinta. Y es que es posible que sean las ilusiones del jardín del Edén quienes nos engañan y nos traicionan de esta manera. Es posible que se haya aliado con Tiempo para hacernos creer que en esta vida no somos mortales y eternos. Puede tratarse de una osadía por mi parte, pero hay ocasiones en las que realmente pienso así. Sí, así es. Soy retorcida, soy un ser pensante. Soy un ser que reniega de la realidad y que busca, sea como sea, perdurar hasta el final y sobrevivir a todas las pruebas del Edén.

No quiero que las agujas del reloj sigan adelante. Pero tampoco quiero que vayan en sentido contrario, hacia atrás. Simplemente quiero que se detenga. Que el tiempo se detuviera para siempre. Me ha costado mucho llegar a este lugar. Las escaleras son resbaladizas y el viento azota con fuerza la marea. Subir uno y cada uno de estos escalones es todo un reto, toda una Odisea. Y yo no he venido aquí para nada. Así pues, me hallo ahora mismo frente al núcleo del Tiempo. Donde todo comienza, donde todo se decide. Donde todo muere. Quiero tiempo. Ansío el poder del Tiempo. No quiero que esto sea un impedimento para seguir adelante. Y puede que esté obsesionada con él y esté persiguiendo un sueño, pero ya he renunciado a demasiadas cosas en este mundo.

Tiempo. Tiempo es lo que necesito. Dicen que el tiempo lo cura todo, pero a veces pienso que no es verdad. Quiero ser yo misma quién acaricie las agujas de ese reloj titánico y poder susurrarle mis deseos. No existan, detente. No marques mis pasos, se mis pasos. No me marchites, hazme eterna. ¿Tan difícil es buscar y fusionarse con la esencia de Edén? Sé que puedo conseguirlo. Sé que debo conseguirlo. El tiempo para sentir miedo ya ha quedado muy atrás. Es hora de responder a todas esas preguntas que nada ni nadie quiso responderme. Es la hora de obligar al Edén a hablar. ¿Existe o no realmente el tiempo en este lugar? ¿Somos eternos? ¿Es cierto que me estoy marchitando? Tiempo. Tiempo es lo que necesito. Tiempo es lo que quiero ser.

4 comentarios:

  1. Tiempo es lo que me puede hacer avanzar o detener
    tiempo relativo
    tiempo perdido
    encontrado
    no hay nada más preciso que el tiempo
    porque aunque lo contamos no sabes con certeza cuanto nos queda.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra verte de nuevo por aquí, tienes toda la razón. Me ha impactado muchísimo esa última confesión que nos has dado. De esta manera yo pregunto... ¿tenemos que temer al tiempo? Gracias por visitar el jardín del Edén. Vuelve cuando quieras. Un abrazo grande.

      Eliminar
  2. El tiempo sin duda puede ser nuestro peor enemigo o nuestro mayor aliado, todo depende del momento y de nosotros mismos. Por desgracia, normalmente solemos verlo como nuestro enemigo, ya que no podemos luchar contra él, no podemos detenerlo, y sólo nos queda seguir adelante, caminando de su lado e intentando hacer frente a su paso. Es triste, pero sin embargo, no hay nada más humano que el tiempo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El tiempo dispone de una cosa que los humanos no poseen... Y eso es la eternidad. El Tiempo es dueño de lo eterno. Los humanos no son más que seres efímeros y errantes. El tiempo sin embargo, no. El Tiempo no comete errores. El Tiempo nunca se detiene para mirar atrás. Los humanos sí. El tiempo nos hace impotentes y por eso no podemos luchar en su contra ni queremos quitarnos la venda que nos impide que no podamos aliarnos a él. El tiempo no es nada humano, es una herramienta, una herramienta que el hombre no sabe controlar. Gracias por compartir con nosotros tu confesión. Espero verte de nuevo pronto por aquí. Hasta la próxima, querida.

      Eliminar