» Nuevas inquietudes sobre el destino.

¿Alguna vez te has preguntado qué es lo que hay más allá de los horizontes del jardín del Edén? ¿Alguna vez has querido llegar al límite del paraíso con tantísima fuerza que durante varias lunas te ha sido imposible encontrar el sueño? Yo sí. Yo sí he sentido esas ganas de querer descubrir nuevos mundos. Quiero que mis ojos tenga la extraordinaria oportunidad de ir más allá y deleitarse con nuevos paisajes. Quiero que mi cuerpo escape de lo terrenal y pueda vivir nuevas experiencias. En definitiva, quiero dejar de sentirme atrapada por la monotonía. 

He llegado a un punto en el que me cuesta mantenerme en pie. Me cuesta muchísimo ser firme conmigo misma, pues por dentro ha estallado una rebelión y no sé ni quiera si deseo combatirla. Es momento de romper todos los lazos. Es momento de destruir las cadenas que me atan con fervor a este lugar. Al fin ha llegado el momento de rebelarse y luchar por ser libre, verdaderamente libre. Después de haber explorado cada rincón de este enigmático Edén mi corazón pide más. No puede el elíseo acabarse aquí, así. Aunque hayan secretos por desvelar, siento la gran necesidad de escapar de todo esto y encontrar un lugar nuevo, virgen, un área en el que todo es posible.

Así es, aunque yo no lo haya buscado, mi corazón ha despertado y con él las ganas de hallar nuevas inquietudes que me hagan sentir viva de verdad. Tanto tú como yo sabemos que durante mucho tiempo mi cuerpo se ha mantenido vacío. Mis sentimientos y emociones han escapado y me han dejado un agujero profundo, oscuro y perturbador en lo más profundo de mis entrañas. Necesito salir de aquí y hacerlo por mis propios medios. Necesito que el cielo se tiña de carmesí y me guíe hacia un nuevo destino que me haga sentir real.

Estoy cansada de permanecer aquí, quiera, esperando, esperando a que algo ocurra o esperando a que suceda algo que jamás tendrá lugar. ¿Es mucho lo que pido? ¿Son demasiado grandes mis nuevas ambiciones? ¿Recibiré un castigo por querer soñar fuera de la caja de Pandora? No sé si quiero saber la respuesta, tan sólo quiero despojarme de todo aquellos pensamientos que no me permiten avanzar hacia delante y ser determinante con mis deseos. Quiero ser lo suficientemente valiente para poder llevar a cabo mis nuevos objetivos. Quiero y necesito que esto salga bien...

He escuchado susurrar al viento, algo que hacia un tiempo no sucedía. Era un susurro muy débil, cuasi silencioso que tuvo lugar una oscura noche de luna nueva. El viento vino y me dijo al oído que algo se escondía más allá de los árboles que me rodeaban, que debía de ir en busca del cielo carmesí. ¿Una oportunidad tal vez? ¿Un secreto? ¿Un nuevo hogar? Quién sabía, el viento no quiso ser más específico. Pero eso fue suficiente para alimentar mis ansias de huir de este paraíso. Debía de encontrar ese cielo carmesí y no mirar atrás. Así pues, ¿sería capaz de afrontar esta nueva aventura? ¿Acaso esto podría ser un reto más? ¿Cabe la posibilidad de que esto se tratara de un juego o una trampa productor del mismísimo Edén? Ah, quién sabía... Debía de ser determinante y decidir qué es lo que tenía que hacer, qué camino debía de escoger: el de permanecer atada a esta natura maldita o la de encontrar nuevos horizontes misteriosos.

¿Estoy preparada para hacerle caso a lo que dicta mi corazón marchito o debo de seguir esclavizada por mis pensamientos y mi mente envenenada? ¿Eran mis deseos lo suficientemente fuertes para dejarme llevar por mis nuevos impulsos? Piensa, Pandora. Siempre hay que pensar en todas las posibilidades. ¿Y si no llegara a encontrar el cielo carmesí? ¿Y si una vez allí no es lo que espero y me decepciono? ¿Todas estas emociones para nada? ¿Y si se trata de una trampa y vuelvo a tropezarme con la misma piedra otra vez? ¿Y si no hay nada más allá de los horizontes del Edén? ¿Y si se tratara de un engaño? ¿Y si, por el contrario, descubro un lugar fantástico donde nadie pueda encontrarme y hallar la auténtica felicidad? Demasiadas incógnitas. ¿Podré ser capaz de revelar la gran mayoría? Una cosa es muy cierta, si me quedo aquí quieta, reflexionando, jamás encontraré la respuesta.

2 comentarios:

  1. Usualmente a donde mas temes llegar es donde algo realmente grandioso se encuentra.
    Saludos

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    1. Grandiosas palabras y muy ciertas. Muchas gracias por compartirlas con todos nosotros. Espero poder verte por aquí más a menudo. Un fuerte abrazo.

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